10 mar 2024
Estado de emergencia
El gobierno de Haití declaró el estado de emergencia el pasado 3 de marzo tras una explosión de violencia que incluyó ataques armados al Palacio Nacional y al Ministerio del Interior, así como la fuga de más de 3.000 presos de las dos prisiones más grandes del país.
Se registraron también altercados en el principal aeropuerto del país y fuertes enfrentamientos entre fuerzas del orden y pandilleros. Estos violentos actos se atribuyen a dos razones principales: el anuncio del primer ministro, Ariel Henry, de convocar elecciones para agosto de 2025, considerado demasiado lejano por muchos en Haití; y su reciente visita a Kenia para negociar una misión de apoyo policial bajo la ONU, lo que desagradó a las bandas criminales que controlan gran parte de la capital. La presión para la dimisión de Henry se ha intensificado tanto a nivel nacional como internacional, con destacadas figuras políticas como Guy Philippe, un antiguo líder rebelde haitiano y exsenador, exigiendo su renuncia, y el Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, instándolo a respaldar una transición política. La persistente violencia descontrolada y la crisis humanitaria en el país han exacerbado las tensiones y cuestionado la capacidad de Henry para abordar la situación. La convocatoria de una sesión especial de la Comunidad del Caribe (Caricom), con la participación de la ONU y otros actores internacionales, el 11 de marzo refleja la urgencia de abordar la crisis en Haití. En este contexto, la permanencia de Henry en el cargo se vuelve cada vez más insostenible, lo que augura un futuro incierto para el liderazgo político en el país caribeño.