Seis meses convulsos en el poder

Como se recodará, sucedió en la presidencia peruana a Pedro Castillo, tras la destitución del mandatario por el fallido autogolpe de Estado. Su gestión comenzó con la muerte de 49 civiles durante las protestas contra su gobierno por los que está siendo investigada preliminarmente por el Ministerio Público por un presunto delito de homicidio . Organizaciones internacionales de derechos humanos han señalado indicios de graves violaciones de derechos humanos y posibles ejecuciones extrajudiciales cometidas por las fuerzas armadas y la policía bajo su mandato. Su gobierno también ha enfrentado desastres naturales, como el Ciclón Yaku y el brote de dengue. En el ámbito internacional, ha tenido dificultades en las relaciones diplomáticas con Colombia, México y Honduras. Destaca la tensión persistente con el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, quien no reconoce a Boluarte como una presidenta legítima y se ha resistido a entregarle la presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico. La desaprobación de la mandataria ha aumentado hasta un 77% en junio. Existen serias dudas sobre su capacidad de mantenerse en el poder hasta las elecciones anticipadas programadas para abril de 2024.