Detención de Tareck El Aissami

El Aissami, conocido por su extensa carrera política como gobernador, diputado, ministro y vicepresidente, fue considerado durante mucho tiempo una figura clave en el gobierno de Nicolás Maduro. Sin embargo, había desaparecido de la escena pública hace poco más de un año, tras renunciar a su cargo después de que una auditoría lo vinculara con una serie de cargamentos de petróleo que nunca fueron pagados a PDVSA, por un monto de aproximadamente 21.200 millones de dólares. También enfrenta cargos por tráfico de drogas en los Estados Unidos, que ofrece una recompensa de 10 millones de dólares por su captura. Su arresto, junto con el de otros ex altos funcionarios y un empresario señalado como intermediario, representa una purga inusual en el chavismo y podría ser una estrategia para fortalecer la imagen del Gobierno de Maduro de cara a las próximas elecciones. Además, estas detenciones podrían tener como objetivo influir en la decisión de Washington sobre si reimponer o no las sanciones petroleras una vez que la semana que viene expire el plazo de seis meses de las exenciones otorgadas en octubre de 2023 en el marco de las negociaciones para la celebración de elecciones presidenciales.